header-historia-page

Historia de Altata

Don Héctor R. Olea, maneja que Altata es un aztequismo y procede de "al", contracción de "atl", agua; tata, de la etimología "tatli", padre o mejor dicho abuelo ("agua del abuelo"). Y Don Pablo Lizárraga Aramburu, lo expresa como "en la tierra del agua" o "en la marisma", mientras que para Amado González Dávila, significa "abundancia de agua".
Altata es una sindicatura del municipio de Navolato, siendo considerado como puerto de cabotaje y espacio recreativo familiar. Por carretera, 27 kms., lo separan de Navolato y 62 kms., de Culiacán. La Bahía de Altata, cuenta con una superficie de 9,100 hectáreas formada por la plataforma continental y la península de Redo, compartiendo con la ensenada del Pabellón que se forma en la península de Lucernilla.
Un 3 de mayo de 1834, Altata fue declarado Puerto de Cabotaje, ya que adquirió importancia por ser habitado, para el desembarque de navíos fletadores de mercancías. Para 1844, se le conoció como Puerto de Altura, pero en 1853, volvió a ser de Cabotaje; así continuando con sus altas y bajas, estuvo abierto al Comercio de Altura, durante la ocupación de Mazatlán por los conservadores (1858-1859), incluso en 1864, el general Antonio Rosales lo habilitó para el Comercio del Altura, esto durante la intervención francesa, cuya categoría sostuvo hasta 1866, posteriormente fue ratificado como Puerto de Altura un 30 de abril de 1881.
banner-historia
En 1890, arribaron a este puerto, famliias de origen oriental, fundando el barrio chino, sin embargo para 1901, algunas de estas familias abandonaron Altata, desapareciendo dicho barrio y su producción de verduras. La afluencia de personas continuaba por el permanente transitar de los vapores y la ocupación de mano de obra, entre 1910 y 1920, llegaron familias del Estado de Zacatecas y otros lugares
El comercio en Altata en 1915 floreció, principalmente con artículos de consumo necesario, como productos de carniceria, abarrotes, panadería, etc.
Gracias a su ubicación geográfica logró convertirse en una zona estratégica con la introducción y distribución de mercancías del exterior al país. Con respecto a la salida de producción nacional, se observa la agrícola, minera e industrial, tanto de Sinaloa como los Estados vecinos de Chihuahua y Durango, a otros lugares de nuestra República y el extranjero, esto por sus conexiones con San Francisco California, mediante el vapor Curazao, de la “Pacific Coast Steamship Co”.
Cosa muy común en el progreso, al paso de los años avanzaron las vías de comunicación en el país, ejemplo de ellos, es el tendido realizado por la línea del Ferrocarril Sud-Pacífico de México (1907), la construcción de las carreteras internacional y Culiacán-Navolato-Altata, propiciando con ello una modificación en los programas de transporte (pasaje y carga); ante la incosteabilidad de operación se canceló la ruta que de 1883 a 1934 mantuvo el Ferrocarril Occidental de México, con su tren conocido como “El Tacuarinero”. Así en Altata, terminó una magnífica fuente de empleo, como fue el movimiento de carga de trenes a los vapores y viceversa, a su vez disminuyeron los turistas.

historia-image-3
En 1883, fueron azotados por un ciclón que los costeños llamaron “El cordonazo de San Francisco”. y el que destruyó el “puente viejo” se registró en 1896. Hasta antes de 1917, Altata recibía barcos  de mediano colado de la época, pero con el ciclón se vino abajo aquél ambiente de prosperidad, siendo muy duro esto para los altateños. incluso algunas familias abandonaron el puerto. Durante los años cuarentas, algunos abarrotes y restaurantes que tiempo atrás jugaron un papel importante en su economía, volvieron a cobrar importancia gracias a la apertura de la carretera.
 El problema de los ciclones se siguió dando, sin embargo, los registrados en 1947, 1953 y 1962 no fueron tan fuertes 
A pesar de este último ciclón, Altata continuó con su recuperación y actividades lucrativas. Cabe mencionar que 
sus recursos pesqueros más comerciales son el robalo, lisa, camarón, pargo, mojarra, curvina, pata de mula, ostión, tiburón, marlin, almeja blanca y rayada. Respecto a la caza, está la del pato arrocero, todo esto distribuido en sus comisarías: Dautillos, Bariometo II, Campillos y El Tetuán.

Personajes

  • Carlos Torres

    Carlos Torres

    Chef ejecutivo del Restaurante Mi Charlie

    Originario del puerto de Altata, en Navolato, Sinaloa, Carlos Torres inició su

    carrera gastronómica en su círculo familiar. Perteneciente a una familia de

    pescadores, Carlos comenzó a pescar desde los 6 años, al mismo tiempo que

    adquiría un gusto por la preparación de diversos platillos locales en el

    pequeño puesto de mariscos de sus padres en la playa de Altata.

     

    Su convicción por la preparación de pescados y mariscos llegó a tal grado que a la edad de

    12 años era el encargado de la preparación de platillos de alta dificultad en la cocina de sus

    padres. Trabajó en el restaurante familiar hasta los 30 años de edad cuando, convencido de su pasión por la pesca y la gastronomía, inició una aventura de trabajo como cocinero en barcos camaroneros en Panamá y Chile. Una vez que logró reunir el dinero suficiente, regresó a su nativa Altata para iniciar su negocio

    gastronómico: El restaurante Mi Charlie.

     

    Mi Charlie cuenta ahora con más de 20 años de compartir con Altata y toda Sinaloa la

    técnica y creatividad de Carlos, frutos de la inspiración que obtiene del mar y de su esposa

    e hijos. Como chef ejecutivo de Mi Charlie, Carlos se ha encargado de crear un menú a

    base de ingredientes y productos marinos locales que obtiene directamente de

    pescadores artesanales de la Bahía de Altata y Ensenada del Pabellón. Sus especialidades

    son la langosta rellena y el filete de pescado zarandeado.

  • Paloma Olivares Valenzuela

    Paloma Olivares Valenzuela

    Paloma Olivares Valenzuela es originaria del puerto de Altata, nació el 5 de septiembre de 1984, su edad es de 34 años, licenciada en ciencias de la comunicación, en la universidad universidad del Pacífico, actualmente es propietaria del restaurante de carnes y mariscos LA PALOMA SEAFOOD. Gracias a sus dedicación en el comercio y sus estándares de calidad y servicios, esta empresa a logrado fidelidad y reconocimiento

    en el sector. Somos una empresa con productos originales gracias a la inspiración de su propietaria, que con su constante innovación logra dar

    gusto al buen gusto. En abril de 1995 dio sus inicios, sólo una Ramada llamada "paloma"dedicada ala venta de mariscos frescos, en las playas de Altata,

    su dueña era Teresa Quiñonez. Se mantuvieron nueve años en el mercado con esta razón social. Posteriormente con el paso del tiempo su antigua dueña sedio los derechos a su nieta paloma Olivares, que en su momento tuvimos altas y bajas, pero poco a poco nos fuimos actualizando y decidimos cambiar el nombre de aquella Ramada por; "LA PALOMA SEAFOOD" y actualmente se encuentra en función.

    En La paloma Seafood de su carta destacan, como entrada, las almejas en su concha, los tacos exquisitos "trio paloma" y el famoso "coco pocamadre".

    Ofrecemos una amplia variedad de servicios; platos ala carta, menú ejecutivos,

    servicio de banquete, platillos infantiles, servicios de postres y variedad en bebidas.

    Hasta el día de hoy gracias al mejoramiento continuo de sus estándares de calidad y servicios, esta empresa logra fidelidad y

    reconocimiento en el sector.

    Somos una empresa con productos originales gracias a la inspiración de su propietaria, que con su constante innovación logra dar

    gusto al buen gusto con su variedad de platos gourmet.

    Estamos por el malecón de Altata, área gastronomía muelle 33 local 28 La paloma seafood. Tel:6727289084 o 6721149594

  • Margarita

    Margarita

    Margarita Martínez Aros nació el 10 de junio de 1947 en la ciudad de Durango, a la edad de 20 años llego con su esposo y sus 3 hijos a la colonia residencial a trabajar. Ahí fue cuando empezó con el oficio del pan de mujer, horneando en un bote de aluminio. Con el pasar de los años tuvo 3 hijos mas los cuales desde pequeños vendían el pan en la playa en jabas de plástico.

    Actualmente ella junto con todos sus hijos viven en Altata con el mismo oficio que desde pequeños les inculco y que ahora ya lleva 3 generaciones. Pan de mujer de la familia Melendrez Martínez, orgullo y tradición desde hace más de 50 años.